Liderar sin pensar: el error con mayor coste que cometí en el último mes
Después de unos meses en los que he priorizado algunos asuntos personales, retomo el calendario de la Boostletter con una reflexión personal.
Durante tres días seguidos fui lo que más critico en otros:
Un líder que no decide. Solo reacciona.
La agenda estaba llena.
Las reuniones, al minuto.
Las respuestas, rápidas.
Pero no pensé.
Solo funcioné.
Y eso —en un equipo que depende de tu dirección—
no es eficiencia.
Es un riesgo sistémico.
Lección: Liderar en piloto automático no solo desgasta. Desorienta al sistema.
Cuando el líder opera desde la urgencia,
el equipo ejecuta desde la confusión.
Y ahí no importa cuánta energía inviertas:
todo se mueve, pero nada avanza.
🧠 El patrón que identifiqué
No es falta de esfuerzo.
Es exceso de inputs sin espacios de intención.
El día se convierte en un flujo de interrupciones que parecen trabajo,
pero que solo impiden dirección.
🗺️ Mi práctica de claridad (en solo 15 minutos al día)
1. Por la mañana:
¿Qué decisión de hoy tendrá impacto más allá de esta semana?
2. A mitad del día:
¿Estoy resolviendo lo urgente o desbloqueando lo que frena al equipo?
3. Al cierre:
¿Qué lideré con intención? ¿Qué hice por inercia? ¿Qué decisión fue clave hoy?
No es productividad. Es conciencia directiva.
Y en un entorno saturado de IA, herramientas y sistemas…
lo que más escasea sigue siendo claridad humana.
En esta nueva serie, estoy desarrollando una serie de recursos para ayudar a líderes como tú a recuperar foco en medio de la complejidad.
Para esta Boostletter he preparado una herramienta para líderes que quieren recuperar dirección en solo 15 minutos al día. Si te interesa recibirla, responde a este correo.
Jorge
Autor de La Boostletter
Pensar con Claridad, Decidir con Criterio, Actuar con Impacto
PD: Si estás leyendo esta Boostletter, formas parte de El Círculo: un grupo de lectores que no buscan más ruido, sino más criterio.
Gracias por estar aquí.