Lo que la mayoría olvida al decir “no puedo”
No puedo.
Así es como la mayoría responde al primer reto.
“No puedo porque no sé”,
“No puedo porque no tengo experiencia”,
“No puedo porque nunca lo he hecho”...
Lo has oído mil veces, ¿verdad?
Y quizás te suena hasta familiar.
Pero aquí va una clave:
ese “no puedo” solo tiene el peso que tú le des.
Y ahí es donde entra un simple “todavía”.
Agregar esta palabra cambia todo:
no lo puedo hacer... todavía.
No lo sé... todavía.
No soy bueno en esto... todavía.
Y créeme, no es autoayuda barata.
He visto empresas transformar su manera de trabajar cuando empiezan a aplicar esta idea.
Parece fácil, pero para muchos, dar ese pequeño paso resulta ser su mayor limitación.
¿Quieres saber cómo grandes empresas lo aplican para no quedarse atrás?
Te lo cuento en el audio de esta semana con ejemplos reales.
Urios
PD. Esta semana comenzamos con la Introducción al Alto Rendimiento y Mentalidad de Crecimiento.